Los temporizadores de la mayoría de los sistemas domésticos de calefacción y agua caliente se encuentran entre los primeros elementos esenciales para mejorar el confort del hogar y reducir los costes de funcionamiento. Estos dispositivos activan los controles de «cadena de mando» para el envío automático de instrucciones de encendido y apagado programadas a otros componentes del sistema. Cada programa de conmutación programado por el usuario ayuda a mantener los niveles de confort deseados y evita el consumo excesivo de combustible al inhibir el encendido innecesario de la caldera.
Normalmente, al utilizar un temporizador para apagar automáticamente el sistema a última hora del día y encenderlo de nuevo a primera hora de la mañana, los costes de calefacción se reducen y el sueño es más reparador gracias a una estancia más fresca. Asimismo, ese mismo temporizador sirve para programar los intervalos de apagado y encendido durante el día para obtener beneficios adicionales.
Características y ventajas
Tanto los temporizadores electromecánicos como los electrónicos suelen proporcionar 2 o 3 ajustes de encendido/apagado al día.
Estos dispositivos pueden programarse fácilmente para periodos de 24 horas, días laborables / fines de semana (5/2 días) o 7 días; algunos modelos ofrecen todas estas opciones en una sola unidad.
Los modelos electrónicos incorporan una batería de emergencia para conservar la memoria del programa en caso de corte de la energía.